No imaginais el valor sentimental que tiene para mí esta foto que tienes aquí arriba. La realicé en el festival Gods of Metal en el mes de Junio y es uno de los últimos conciertos que Pepsi Tate pudo dar con Tigertailz; a la vista está que con muchos kilos de menos, pues el cáncer de páncreas que se lo ha llevado ya estaba haciendo estragos, pero con la misma ilusión y ganas que cuando tenía 20 años. Para mí ya fue muy emotivo entonces ver a Pepsi, uno de los músicos que me metió el glam en vena siendo una quinceañera, haciendo un esfuerzo grandísimo por estar una vez más en el escenario, pasando de las recomendaciones médicas y dando todo por su público. Se me pone un nudo en la garganta al pensar que entonces no pude imaginar que sería la última vez que le vería en directo.
Pepsi era un músico pero, sobre todo, era un fan de la música y eso es lo que más le honra. Durante todo ese mismo festival estuvo abajo, con la "plebe", disfrutando de los demás grupos y totalmente extasiado con Mötley Crüe, charlando con todo el mundo y dejando a un lado un drama personal que... a la vista está el resultado.
En el Gods y anteriormente en en el festival Lorca Rock (donde hicimos la foto de abajo, con Pepsi precisamente a mi lado); esas fueron mis dos únicas ocasiones de conversar con Tate, en lo que fue casi cumplir un sueño de juventud y con la agradable sensación de toparme con una persona sencilla, abierto a cualquiera que se le acercara y sin estrellitis crónica. Un tipo que creyó en el rock n' roll hasta su último minuto de aliento y que nos dejaba ayer por la mañana con sólo 42 años... Muchas gracias por todo lo que nos has dado. Te echaremos de menos!
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